Características de la lana
Su obtención
La lana crece en la piel de animales vivos, como método para aislarlos del frío. Esta función térmica es la que se intenta conseguir cuando, una vez trasquilada, empieza su proceso de tratamiento y se crean prendas de ropa con ella. La oveja es el animal que más lana produce, siendo especialmente importante aquella producida entre los 3 y los 6 años de edad, pues es la más rica en calidad.
Su clasificación
Podemos encontrar diferentes tipos de lana, en función de su tipo. La lana Merino es aquella que producen las ovejas Merino y, gracias a sus características y su excelente calidad, suele usarse para realizar prendas finas. La lana tejida se usa para realizar mantas, telas y alfombras, debido a su textura menos fina. La lana ordinaria es espesa, larga y suave, y se obtiene de las ovejas ordinarias sin que su tejido haya pasado controles de selección. Se usa para fabricar relleno de colchones y almohadas, entre otros usos.
Su resistencia térmica
El poder térmico de la lana es la principal característica de este tejido, y la que la hace especialmente interesante para el invierno. Sus fibras permiten crear espacios de aire entre ellas que actúan como aislantes, gracias a ello es la prenda de mayor uso en días de frío.
Sus creaciones
Encontramos muchas creaciones textiles hechas de lana, todas ellas para el invierno. Chaquetas, sueters, guantes, gorros, bufandas y mantas, entre otros, suelen estar creados de este material. Ahora en la actualidad utilizamos la lana para realizar diferentes manualidades como las que vemos a continuación:
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